La importancia de una buena hidratación para los deportistas

Un tema que es fundamental en los deportistas es la hidratación. Beber suficientes líquidos durante el día es la base para que el cuerpo humano pueda tener un funcionamiento adecuado, además que permite a los atletas obtener mayores beneficios del trabajo físico continuo que realizan durante los entrenamientos y juegos.

La hidratación deportiva

“La hidratación desde el punto de vista científico es una adecuada estabilización de los líquidos en nuestro cuerpo. Es importante decir que el 70% de nuestro cuerpo es agua y esto es más importante en los niños, de ahí la frase de que sin agua no hay vida”, afirma Adrián Cruz González, Nutriólogo del Deporte de la Clínica Sports & Health.

En los niños y jóvenes que practican algún deporte de competencia, una correcta hidratación es tan fundamental como una buena nutrición, ya que el desgaste físico de su cuerpo es mucho mayor y necesitan que su organismo realice todas sus funciones de forma adecuada.

“Por ejemplo en deportes que no son 100% aeróbico y que tienen ciertas cargas de resistencias mixtas (fuerza, velocidad, etc.) es muy importante la hidratación porque parte de la fuerza muscular es agua. El músculo está hecho por agua de ahí la importancia de estar bien hidratados”, asegura el especialista en nutrición deportiva

Beneficios de una buena hidratación

Por lo tanto, una adecuada hidratación no solamente va repercutir en el correcto funcionamiento de los “procesos celulares, digestivos y circulatorios del cuerpo, sino que es un elemento fundamental en la recuperación física del atleta”.

Como regla general, el descanso es otro aspecto elemental en la preparación del deportista, pero sin un buen consumo de agua, “el atleta puede presentar síntomas de sobre entrenamiento y sufrir la falta de recuperación por que no duerme bien; hay falta de apetito;  no tiene suficiente energía y no está concentrado en la escuela”, dice Armando Cruz.

Evitar lesiones musculares

Y agrega: “pero la primera consecuencia de estar mal hidratados es la falta de recuperación durante todo el proceso de entrenamiento, un síntoma muy evidente es que los jugadores se lesionan muy rápido, porque el agua finalmente te ayuda a que los tejidos, tendones y ligamentos estén bien aceitados, por decirlo de alguna manera”.

Tomar agua durante el día

Así, la medida de agua suficiente es entre 2 litros y 2 litros y medio al día. Pero en el caso de “un niño o joven deportista –subraya el nutriólogo Cruz-, se debe tomar líquidos de manera constante desde el inicio del día con al menos dos vasos de agua; luego en los recesos durante el entrenamiento o juego con pequeñas cantidades de agua y al término de éste, beber medio litro o hasta un litro es muy bueno”.