Overblog
Edit post Seguir este blog Administration + Create my blog

Un blog de noticias, opinión, entretenimiento y un poco de todo

El Blog de Daniel Higa Alquicira

Los grupos de autodefensa en Michoacán, ¿quiénes los apoyan?

Era el mes de julio de 2013 cuando se presentó en la  Ciudad de México un grupo de encapuchados para dar una conferencia de prensa. Venían del municipio de Los Reyes y Buenavista Tomatlán, Michoacán. Eran siete hombres de baja estatura, vestían ropa humilde y hablaban pausado pero expresaban bien sus ideas. 
 autodefensas-1.jpg

Ellos eran los representantes de las “rondas comunitarias” –como ellos mismos se denominaron-, que se habían formado para proteger a la población de esas comunidades ante los abusos de los grupos criminales. 

“No sabemos quiénes son estos grupos de criminales, pero nos extorsionan, secuestran, violan a las niñas y mujeres y asesinan”, dijo uno de ellos como para justificar sus acciones. 

Pero ellos representaban al pueblo de campesinos, indígenas, pobres y además, estaban indefensos porque ninguna autoridad los ayudó cuando denunciaron los atentados en su contra –uno de los primeros enfrentamientos armados- perpetrado en las afueras del palacio municipal de Los Reyes contra un grupo de manifestantes indefensos. 

Han pasado seis meses desde esta primera aparición y ahora los grupos de  autodefensa –nombre que tomaron como para darle más forma y cohesión a los diversos grupos que se fueron armando – son una incógnita y un dolor de cabeza para el gobierno local y federal. 

Guiados por el doctor José Manuel Mireles Valverde, consejero general del Consejo Ciudadano de Autodefensa de Tepalcatepec y considerado como el líder más visible de los grupos de autodefensa de ese estado, ahora ya tienen bajo su control al menos 20 municipios de la denominada Tierra Caliente de Michoacán

Con un argumento bastante sólido que les permitió tener un arraigo social importante, estas autodefensas han ido creciendo a la par de la violencia en ese estado. Cansados de los abusos, secuestros, asesinatos, extorsiones y violaciones a mujeres de niñas de estas comunidades, los hombres se armaron y ocuparon el espacio que las policías –municipales, estatales y federales- dejaron libre desde hace mucho tiempo. 

No había seguridad pero tampoco hay autoridad confiable. Por eso los únicos confiables son los mismos pobladores que con un espíritu solidario se ayudan y no son capaces de traicionar al vecino y quien así lo hiciera, el peso de toda su comunidad caería sobre el traidor matando así su prestigio y su pertenencia grupal. 

En la semana que terminó hubo enfrentamientos, cierre de carreteras, quemas de vehículos, de locales comerciales, varios heridos y hasta muertos que dejaron colgados de los puentes. 

Con estas imágenes pareciera que en Michoacán no está ni el Ejército ni la Policía Federal ni la propia Marina. Son civiles que se enfrentan a otros civiles en escaramuzas y emboscadas. Las autodefensas avanzan y toman poblados como si se tratara de una revolución o una guerra. 

Pero hay varios datos que apuntan a que el gobierno federal como el estatal, están de acuerdo y apoyan a los grupos de autodefensa porque es la mejor forma de mantener el control y derrocar al crimen organizado en la zona. 

Hay rumores de que incluso hubo una –o varias reuniones- entre Mireles y otros líderes de las autodefensas con altos mandos militares de la zona y el propio Procurador de la República, en donde se apoyaba unánimemente la decisión de permitir que siguieran armados y en pie de lucha como un movimiento social legitimo pero “ilegal”. 

Esto ha provocado que algunos presuman que es el propio gobierno el que los provee de armas y equipo. Sin embargo, los miembros de las autodefensas aseguran que nadie los apoya financieramente y que su armamento y equipo ha crecido porque es parte del “botín de guerra” quitado al enemigo. 

Pero hay incluso voces que afirman que esta estrategia ha sido parte de la asesoría en estrategias de seguridad nacional que le ha dado el asesor colombiano Óscar Naranjo Trujillo al presidente Enrique Peña Nieto. 

Sin descartar esta opción, hay que recordar que las Autodefensas Unidas de Colombia fueron creadas como parte de la lucha contra Pablo Escobar, la guerrilla, las FARC y los paramilitares; pero finalmente se convirtieron en un grupo criminal poderosísimo que operaba desde la Oficina de Envigado, donde controlaba el narcotráfico, extorsiones, secuestros y asesinatos en toda Colombia-. 

Es decir, más bien La Familia Michoacana, Los Caballeros Templarios o Los Zetas serían el equivalente a las autodefensas colombianas y no el grupo de ciudadanos que se armó para defender a sus comunidades y familias. 

Esto ha puesto a Michoacán en una bomba de tiempo. Si las autoridades siguen fallando en su estrategia para pacificar este estado, en muy poco tiempo esto va a dejar de ser un foco aislado en el mapa nacional y se van a empezar a reproducir acciones de este tipo en otros estados vecinos como Jalisco, Guerrero o el mismo Estado de México. 

Y es que ¿quién va a estar de acuerdo en que sistemáticamente te extorsionen, amenacen y te obliguen a pagar cuotas, al mismo tiempo que ves cómo violan y secuestran a las niñas y mujeres de tu familia y comunidad? 

No hay justificación a la violencia pero sí hay una exigencia pública de que los actos violentos se han generado por la falta de capacidad, la aplicación de estrategias equivocadas y la maldita corrupción con la que operan las autoridades de todos los niveles. 

Y cómo lo han dicho varias voces en el entorno nacional: “Ya estamos hasta la madre y si las autoridades no pueden, que se larguen…” 
Compartir este post
Repost0
Para estar informado de los últimos artículos, suscríbase:
Comentar este post