El derecho a la libertad sexual

El 17 de mayo quedó oficialmente como el Día Estatal de la Lucha Contra la Homofobia, luego que el Gobernador Francisco Olvera decretó esta fecha como un símbolo de la libertad y tolerancia que debe imperar en Hidalgo con respecto a estos temas sexuales.

Como generalmente pasa en temas controvertidos, la homosexualidad es un tabú para muchos sectores de la sociedad. Sin duda es un paso importante que las autoridades implementen este tipo de acciones para resguardar los derechos individuales y de grupo de los homosexuales, transgénero, lésbicas y bisexuales.

En Hidalgo, las diferencias en las preferencias sexuales tradicionales siguen siendo motivo de discriminación y agresiones. Según la Coalición de Ciudadanos por el Respeto a la Diversidad, 48% de la población hidalguense siente algún tipo de rechazo a las personas homosexuales.

Además, se han presentado ocho asesinatos considerados como crímenes por homofobia en los últimos años. A pesar de que no es una cifra significativamente alta, son un aviso de que no hay actos de violencia en contra de los homosexuales.

Este es sin duda un tema complicado y que a pesar de que ya se trata abiertamente y que han ganado mucho terreno en la defensa de sus derechos, la sociedad en general sigue teniendo una visión conservadora hacia las diferencias y las prácticas sexuales de las personas.

El mundo moderno exige que los derechos de todas las personas sean respetados, independientemente de sus gustos sexuales. Hay ciudades en México que ya permiten las bodas gays y hasta la adopción de hijos por parejas del mismo sexo, cosa que  ha modificado legalmente la concepción de la familia tradicional.

Sin embrago, moralmente seguimos siendo excluyentes y cerrados con respecto a estas posibilidades de formar una vida en pareja y un hogar. El que se declare un día específico para la diversidad sexual en Hidalgo es un paso hacia adelante para toda la sociedad, que tendrá que adaptarse a las nuevas tendencias y formas de organización, lo que provocará una apertura y una mayor tolerancia hacia lo que es diferente a uno.

Hay que avanzar hacia el reconocimiento y respeto del otro o de los otros, y en esa medida seremos una sociedad más armónica y funcional. En este caso se trata de los derechos de los homosexuales, pero están los derechos de las mujeres, de los niños, de los adultos mayores, de los indígenas y de todos los grupos vulnerables que necesitan también sean respetados y aceptados.

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